martes, 12 de octubre de 2010

Maldita encrucijada


Aquí estoy en mi silla sentado, he estado llenando poco a poco las estanterías con libros de todos los tipos, pero, ahora mismo, he perdido todas las fuerzas, necesito ayuda, alguien que me ayude a elegir... Oh, maldita musa,¿ por que me has abandonado? Respondeme, te lo ordeno, te lo suplico, no me abandones... Empiezan a salir grietas en lo que debía ser mi hermoso refugio, me acerco a una ventana cuyos cristales están agrietados, manchados, rotos...y en el exterior no veo más que soledad y oscuridad.  Solo quiero salvar dos cosas por encima de todo,  las sillas y el cuaderno. Solo puedo llevar conmigo 3 sillas, así que... me llevaré la "silla electrónica" ,  la "silla musical" y la "silla de las artes", la mía.... que se quede aquí, que se hunda bajo el peso de estos muros y que sus gritos se ahoguen entre el estruendo de la caída de este lugar. Cojo como puedo las sillas, me meto el cuaderno en el suelo y me miro las palmas de las manos, me arden, las palabras "físico" y "platónico" me quedan, querría arrancármelas de ellas, por una de las ventanas entra un rayo de luz aunque he mirado antes y solo se veía oscuridad, una silueta se ve a través de ella, ¿será mi musa?, ¿mi salvación? eso espero, porque estas sillas pesan mucho y aunque me cueste la vida las salvaré...me... me fallan las fuerzas, ayúdame o desconocida, te tiendo la mano platónica, cojela, no la sueltes  y llévame lejos de este lugar que debía ser mi lugar de descanso y se ha convertido en mi pesadilla...

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